La ley de California hace todo lo posible para proteger tanto a los propietarios como a los inquilinos. Por ejemplo, los propietarios pueden desalojar, retener los depósitos de seguridad o presentar demandas civiles en respuesta a los daños sustanciales causados por los inquilinos en sus unidades.
Pero, por otro lado, los propietarios también deben mantener espacios limpios y seguros para sus inquilinos. Eso incluye garantizar una adecuada impermeabilización y protección contra la intemperie del techo y las paredes exteriores, así como de las ventanas y puertas.
Con demasiada frecuencia, los propietarios posponen las reparaciones y el mantenimiento críticos para ahorrarse un poco de dinero. Esto puede causar una serie de problemas a los inquilinos, que van desde daños a su propiedad hasta problemas de salud o lesiones graves. La impermeabilización, las reparaciones del tejado y las goteras pueden ser costosas de arreglar, pero no hacerlo puede acabar causando muchos más daños y costes con el tiempo.
Si usted ha tenido daños a la propiedad o problemas de salud debido a las fallas de mantenimiento del propietario, usted puede tener derecho a una indemnización. Póngase en contacto con Riley | Ersoff LLP hoy mismo al (888)495-9272 para una consulta gratuita.
Los fallos de mantenimiento del propietario pueden provocar la aparición de moho
Para la mayoría de los mohos, las condiciones perfectas son el calor, la humedad y la oscuridad. La parte inferior de un tejado, el interior de un armario de fregadero o el espacio de un edificio por debajo del nivel del suelo pueden ver crecer rápidamente el moho en las circunstancias adecuadas.
Algunos mohos son peores que otros, y el moho negro, en particular, resulta difícil de erradicar y se asocia a una serie de problemas de salud humana.
En cuanto informe a su casero de la existencia de fugas de agua en el tejado, el techo, las ventanas, las puertas o las tuberías, éste deberá tomar medidas para solucionar el problema. Si no lo hace, los daños podrían empeorar con el tiempo, así como el desarrollo de un problema de moho que le impida vivir en el espacio de forma segura.
El moho debe ser tratado lo antes posible por profesionales para garantizar que no vuelva a aparecer.
La intoxicación por moho negro es un problema grave para los inquilinos
El moho negro tóxico, también llamado Stachybotrys chartarum, puede acumularse rápidamente en las alfombras, las paredes, el techo o el suelo y extenderse por todo el espacio. A continuación, pueden desprender esporas y micotoxinas que provocan graves problemas de salud en los seres humanos y en los animales domésticos.
Los síntomas más comunes de la exposición al moho negro son respiratorios. Puede provocar tos y estornudos persistentes, ojos rojos e irritados, sarpullidos, fatiga y dolores de cabeza. Los casos graves pueden provocar vómitos y hemorragias en los pulmones, la garganta y la nariz.
Una simple fuga puede llevar pronto a una casa que ya no es habitable. Y lo que es peor, puede acarrear enormes facturas médicas, especialmente si hay alguien en su casa con alergias al moho, asma o un sistema inmunitario comprometido. Los niños y los ancianos también son más vulnerables que los adultos sanos. Si su casero se negó a solucionar una fuga que provocó la aparición de moho, puede ser el momento de considerar la posibilidad de emprender acciones legales contra su casero.
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